Y en el acervo de los túneles perdidos
pende de un llanto un niño olvidado.
Hace el olvido su más franca agonía:
último respiro,
le regala un barco.
Yo tuve por llanto sereno dos luces
que se fueron apagando, que poco ardieron.
No recuerdo recuerdos, yo extraño.
Tengo pesares
y también un barco
El bosque que rodea al árbol enfermo
conoce otros acervos y crea un túnel.
No engaña cuando juega con las aguas
que llevan al niño
que tripula un barco.
3 comentarios:
me parece a mi o siempre esribís sobre cosas trstes??
bue, si, es como q ese sentimiento es más exteriorizable a través de escritos... o al menos asi me pasaba a mi...
gracias por todo lo q me brindás amigo de mi alma!! no te das una idea lo importante q sos para mi!! te kiero muhisimo!!!
Gabys
Nadie le va a poner música a este poemita??
Anonimísimo
mirá que buena idea anonimísimo
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